Al elegir zanahorias, la apariencia juega un papel importante: cuanto más bella, más útil. La sustancia saludable caroteno, que también se encuentra en cantidades significativas en las verduras de calabaza, es responsable del hermoso color naranja.

La verdura no debe agrietarse ni deformarse. La zanahoria ideal es recta, firme, lisa y redondeada al final. La frescura se puede determinar por el hoyuelo de la parte superior, que debe ser verde.

Las zanahorias se pueden vender lavadas, se ven mucho más limpias. El consumidor debe ser consciente de que la calidad de esta zanahoria no es mejor que la que no se lava y tener cuidado a la hora de elegirla, ya que se conserva peor y se seca y deteriora mucho más rápido. Sólo tiene una ventaja: se vende sin suciedad adherida